Si el año pasado ya quedamos sorprendidos con La Gomera, en esta ocasión La Palma no ha sido menos. Es la segunda isla comenzando por el Oeste, solo El Hierro está más separada del continente africano. Es una isla sobre todo muy montañosa, con dos vertientes increíblemente diferentes, en su flanco Este la vegetación es la protagonista, auténticas selvas pueblan las laderas que caen al océano. Según a la altura en la que nos encontremos en este costado de la isla, las plantas y árboles que nos rodean serán unos u otros, En los primeros 200/300 metros de desnivel las plantaciones de plátanos, la vegetación casi tropical, y los cultivos para consumo humano son los protagonistas. A partir de esa altura comienza a aparecer una selva que lo va inundando todo, helechos y otras plantas de enormes tamaños inundan la montaña, podremos encontrar brezos como arboles y un sin fin de arboles flores y otras plantas que crecen sin descanso buscando la luz, laurisilva, tajinastes, bejeques, tarajuntias, dragos… . Esta cerrada selva se extiende hasta más allá de los 1.000 m de altura, a partir de ahí es el pino canario el que toma el protagonismo hasta los 2.000 m, luego solo será el matorral de montaña el que llene las laderas hasta el punto más alto de la isla a más de 2.400 m, el Roque de los Muchachos.
En la vertiente Oeste la cosa cambia, no existe la selva húmeda del otro costado de la isla. A baja altura existe una enorme cantidad de plantaciones de plátano y uva, más arriba encontraremos arbustos y pequeñas plantas para dejar poco después el paso libre al pino canario.
En el extremo sur de la isla encontraremos el parque de los volcanes de La Palma, donde destacan el S. Antonio y el Teneguía, con las últimas erupciones en el siglo XX. Merece la pena acercarse a contemplarlos desde el borde de sus cráteres, una extraña sensación recorre el cuerpo al estar en esos lugares.
Para los amantes de la montaña y el senderismo, hay que decir que esta es una isla que ofrece una gran red de senderos perfectamente indicados, los hay de unos pocos kms, hasta los de varias jornadas.
Al tratarse de una isla situada en el océano Atlántico el buceo es otro de los alicientes que encontraremos, una inmersión en sus aguas es un buen recuerdo para llevarnos, la fauna que encontraremos bajo la superficie del mar es la típica de estas islas, peces trompeta, viejas, tamboriles, morenas, meros, las grandes rayas conocidas como chuchos etc.
La Palma es una isla predominantemente rural, una población de algo menos de 90.000 habitantes deja claro que no es una isla de aglomeraciones. La misma capital, Sta Cruz de La Palma, es muy pequeña y se puede recorrer fácilmente a pie. Hay muy pocas infraestructuras de grandes dimensiones enfocadas al turismo exterior, y lo que si pudimos observar es que a los palmeros les gusta veranear en su isla. Las playas de arena no abundan, las principales son Los Cancajos, Tazacorte, Pto Naos, Charco Verde, y alguna otra pequeña cala, las más protegidas al oleaje son la situadas en la costa Oeste. Su población es afable y no nos costará entablar conversación con cualquier habitante de la isla.
Pude disfrutar de algunos de los recorridos más transitados de la isla, los nacederos de Marcos y Cordero, la ruta de los volcanes, y un recorrido por la cresta del Roque de los Muchachos. Son gratos recuerdos que me llevo de la isla, por desgracia no puedo enseñar demasiadas fotos pues mi cámara me desapareció en el hotel y solo alguna instantánea de las cámaras de mis hijas y de la de mi suegro son las que nos hemos traído. En definitiva, una isla que merece ser visitada, por algo la llaman “la isla bonita”.
Dejo unas imágenes de la visita.
1 comentario:
Interesante resumen de La Palma, por lo que deduzco de ello, habéis aprovechado los días con actividades variadas.
Un saludo a la família!
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