Ahora, después de la resaca de sentimientos desatados ayer en el Gorbea y viendo todas esas fotos que aparecen en http://www.mendiak.net/index.php es cuando me doy realmente cuenta de lo que ayer sucedió.
He intentado por un momento ponerme en el pellejo de Imanol, ¡ cuantos recuerdos le habrán venido a la mente durante la ascensión a la cima del Gorbea !. Ayer nos hemos dado todos una lección que no debemos de olvidar, fuimos capaces de juntar en la cima de un monte tal cantidad de sentimientos que ese día no se nos borrará de la memoria nunca. Palabras como solidaridad, compañerismo, alegría, esfuerzo, quedaron todas fundidas en una sola, EMOCIÓN.
No es habitual ver a mujeres y hombres hechos y derechos llorar de emoción henchidos de alegría en la cumbre de una montaña. Son escenas poco habituales en nuestra sociedad, una sociedad que parece ponerse cada día un escudo contra los sentimientos que nos salen del interior.
Deberíamos de ralentizar esa locomotora que arrastra nuestro tren diario de vida y que circula tan rápido que no nos deja ver lo mejor del paisaje que nos rodea, cada día que pasa estoy más convencido de que más nos valdría dejarnos guiar por lo sentimientos que manan del corazón y no tanto por eso que llamamos sentido de la razón.
Imanol y su familia ayer descubrieron que tienen más amigos de los que imaginaban, pero nosotros también tenemos que darnos cuenta de algo muy importante, son una familia muy unida y capaz de hacer realidad un sueño. Ellos y su ilusión han sido los verdaderos artífices de que Imanol se sienta hoy uno más de la familia Mendiak. Nosotros al fin y al cabo solo hicimos lo que tanto nos gusta, juntarnos un grupo de amigos para subir a una montaña.
Gracias a la fortaleza de algunos, al ingenio de otros y a la ilusión de su familia, Imanol hoy estará muy alegre, ¿ hay algo más hermoso que hacer felices a los demás ?
Zorionak Imanol
Mi pequeña aportacion
Las lágrimas del Gorbea from Fernando BD on Vimeo.
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